Perder los datos de tu disco duro no es, afortunadamente, algo que ocurra todos los días. Por ello, la mayoría de clientes que solicitan los servicios de Ondata desconocen la problemática de la recuperación de datos, y en ocasiones sus expectativas son muy diferentes de la realidad.
Algunas falsas creencias sobre el funcionamiento de los discos duros no son de mucha ayuda en la misión de rescatar la información perdida. En esta serie de artículos intentamos aclarar algunas dudas que nos encontramos cada día en el servicio de recuperación de datos.
«No es un fallo mecánico porque el disco no se cayó al suelo.»
Los discos que han sufrido una caída suelen tener fallos mecánicos; pero eso no implica que todos los fallos mecánicos se originen por caídas. A veces, los discos vienen mal de fábrica y alguna pieza interna empieza a fallar hasta que acaba provocando un fallo mecánico que deja el disco inutilizable. Hay discos que con sólo una o dos semanas de uso fallan mecánicamente. También puede haber otras situaciones, como los picos de tensión, que acaban provocando fallos mecánicos.
«Al disco no le pasa nada, simplemente no funciona».
Entendemos lo que quieren decir los usuarios cuando nos presentan así su disco averiado: el disco no sufrió ninguna caída o subida de tensión, no se formateó, etc. Pero cuando un disco no funciona, ¡es porque algo le pasa…!
Aunque no sean tan llamativos como un disco que hace ruido de clic o de golpeteo, o que huele a quemado, esos otros fallos en los que al disco “no le pasa nada” también van a requerir herramientas especializadas y muchas horas de trabajo por parte de los expertos del laboratorio de recuperación de datos, a veces incluso más que con otros tipos de fallos.
«Pero si es un pen drive muy pequeño, tiene que ser más fácil de recuperar. Y más barato.»
Los pen drives o memorias USB funcionan con memoria flash, que es una tecnología más moderna que los platos magnéticos de los discos duros y que requiere unas herramientas y unos procesos diferentes. En muchos casos, es un proceso más complicado que el de los discos duros. La facilidad o la dificultad va a depender de la tecnología que haya que utilizar para la recuperación, más que del tamaño.
Más artículos en esta serie:
- Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte I]
- Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte II]
- Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte III]